Esa sensaciòn.

Es esa sensación de estar todo el día esperando que simplemente se cruce por tu camino, que pase por tu lado y te dedique una sola mirada. Esa sensación de que se te cae el mundo encima cuando le echas de menos. Y de sentir que tienes el mundo a tus pies cuando, por un segundo te mira. Esperar como una tonta una de sus sonrisas, que a pesar de todo sabes que no va a venir. Esperar que cualquier día al pasar por tu lado puedas escuchar un simple saludo que suba tu estado de ánimo a tal punto que te olvides hasta de donde estás. Esa sensación de, por primera vez, saber que estás enamorada. Querer demostrar a todo el mundo que no es una puta obsesión de cuatro días. Por qué, ya es mucho tiempo, en el que este sentimiento, no ha hecho más que crecer.